Un pacto histórico para renovar el Congreso
Por: Yidis Jesús Gahona Rodríguez - Foto portada: Verdad Abierta
El 2022 será un año clave para avanzar en las transformaciones que necesita Colombia, pues nuestro país ha sido gobernado por unas pocas familias que incluso pueden contarse con los dedos de las manos: los Santos, los Lleras, los Turbay, los Uribe, los Pastrana. En las regiones el panorama no es diferente. Sé que en cada departamento también puede narrarse la historia de esas élites que heredan a sus hijos y familiares los cargos públicos.
Esos personajes se casan y se contratan entre sí y recurren a todo tipo de maniobras para perpetuarse en el poder, ya que han vivido del Estado, casi desde que este existe. Ellos cuentan, además, con congresistas que les patrocinan las decisiones que toman para mantener sus privilegios y los de sus financiadores y amigos. En una de las peores crisis económicas que ha tenido Colombia, a finales del 2020, senadores y representantes a la Cámara recibieron un aumento de salario acumulado de 17 millones de pesos, mientras que el salario mínimo de un colombiano promedio solo aumentó $30.723.
Sin embargo, no es el Congreso lo que está mal, sino la conformación que actualmente tiene. Por ejemplo, 4 de cada 5 congresistas son de los partidos tradicionales, grupos que han estado involucrados en grandes escándalos de corrupción en el país; 3 de cada 4 congresistas son mayores de 40 años, lo que hace que no representen los deseos e intereses de la juventud – como la posibilidad de acceder a educación superior gratuita y de calidad -, y 4 de cada 5 congresistas son hombres, evidencia de que la política es una actividad donde prima el machismo y no se le da voz a sectores de la sociedad excluidos.
Ante esta realidad y entendiendo que hoy puede ser un momento favorable para propiciar transformaciones, movimientos sociales y fuerzas políticas alternativas (Colombia Humana, Unión Patriótica, MAIS y Polo Democrático) se vienen juntando en lo que han llamado Un pacto Histórico para Colombia. Este acuerdo tiene como propósito ganar las elecciones a la presidencia en 2022 y conseguir mayorías en el Congreso de la República, logrando que 55 Senadores y 86 Representantes a la Cámara sean expresión de la diversidad y la ciudadanía de a pie que quiere sacar de la pobreza a 17 millones de colombianos, crear trabajo bien pago para los 3 millones de desempleados, evitar el robo de los recursos públicos, garantizar la atención en salud y la educación como derecho para todos, impulsar políticas para hacer frente al cambio climático, promover la vida en todas sus formas ¡Los animales también tienen derechos! Y, entre otras medidas, tomar acciones urgentes frente al hecho de que, cada 19 minutos, una persona es víctima de violencia sexual.
Estará en manos de la gente entender que las decisiones políticas deben ser tomadas en serio, que es más importante elegir buenos gobernantes y congresistas que se comprometan a trabajar para resolver nuestras problemáticas. Será crucial que la gente no venda su voto porque a cambio de unos pocos pesos, se está asegurando su pobreza y la de sus hijos, ya que los politiqueros de oficio harán poco para que la región cambie de rumbo.
Los políticos tradicionales no van a cambiar, eso es seguro. ¿Por qué no nos arriesgamos a cambiar de políticos?