
Inicia veda pesquera en la Orinoquia para proteger especies en temporada reproductiva
Con el objetivo de proteger la principal época reproductiva de los peces de consumo y ornamentales en la cuenca de la Orinoquia, la Autoridad Nacional de Acuicultura y Pesca (AUNAP) dio inicio a la veda pesquera, una medida que busca garantizar la conservación de las especies y la sostenibilidad del sector.
La restricción, establecida mediante la Resolución 2663 del 9 de noviembre de 2022, se aplicará en los departamentos de Vichada, Guainía, Arauca, Casanare, Meta y Guaviare. Durante este periodo queda prohibida la pesca, comercialización, acopio y transporte de peces provenientes de poblaciones naturales.
“Durante este tiempo está prohibido pescar, comercializar, acopiar o transportar especies ornamentales y de consumo provenientes de poblaciones naturales de seis departamentos. La medida busca proteger los peces en su época reproductiva y asegurar la sostenibilidad del sector. Respetar la veda es proteger la vida en nuestros ríos”, afirmó Karen Ehemann, directora técnica de Inspección y Vigilancia de la AUNAP.
La Orinoquia alberga un valioso patrimonio natural representado en especies de gran importancia ecológica y económica. En total, se han identificado 55 especies de consumo frecuente —como el amarillo, la cachama, el bagre rayado, el bocachico y el valentón—, así como cerca de 324 especies con valor ornamental, entre las que destacan el escalar altum, la corredora Meta, el cardenal y la raya motoro. De estas últimas, 150 son endémicas, lo que significa que solo habitan en esta región del país.
La AUNAP hace un llamado a pescadores, acopiadores, comercializadores, exportadores, acuaristas, transportadores y consumidores para que respeten las medidas de manejo pesquero. Además, recuerda que quienes tengan existencias de recursos pesqueros de consumo al inicio de la veda deberán reportarlo por escrito a más tardar el 22 de abril, al correo regional.villavicencio@aunap.gov.co.
La implementación de la veda busca garantizar que las futuras generaciones puedan seguir disfrutando y aprovechando responsablemente los recursos de la región, en armonía con los ciclos naturales del ecosistema fluvial de la Orinoquia.