[Video] Mujer afectada entrega detalles de lo ocurrido en altercado con agentes de tránsito en Inírida
Por estos días en Inírida no se habla de otra cosa que de los agentes de tránsito. Muchos ciudadanos se muestran inconformes porque en la ciudad ahora se aplican comparendos y se hacen cumplir las normas de tránsito a cabalidad, pero la Administración municipal muestra poco o cero interés por intervenir el deplorable estado de las vías.
Pero, un hecho ocurrido el pasado 22 de septiembre, que se movió ampliamente por redes sociales el pasado 28 de septiembre, ha provocado aún mayor recelo de los iniridenses frente al trabajo de los agentes de tránsito.
En un video de apenas 22 segundos se aprecia un altercado en el puesto de control que los agentes tenían ese día en horas de la noche. En él aparecen los cuatro con los que actualmente cuenta la oficina de tránsito. La única mujer agente, en un tono desafiante reclama: “le iba a tirar la moto, y se enoja. Entonces, se la deja tirar”; al fondo se observa una moto, un policía, un hombre, una mujer con un bebé en brazos y otro niño a su lado.
Luego, uno de los agentes, el más gordo, intercambia palabras de grueso calibre con un hombre al que en el video le dicen Juan Diego, que apenas se alcanza a ver en el video. El tono de ambos es desafiante, los gestos y movimientos de los dos hombres son hostiles. El video se interrumpe.
Por sí solos esos 22 segundos no son suficientes para tener claridad de lo que ocurrió ese 22 de septiembre a las 7:30 de la noche. ¿Por qué se inició la discusión? ¿Cómo?
Esas respuestas las tiene Kelly Sánchez, la mujer que aparece en el video con un bebé en los brazos. Ella es enfermera en el hospital de Inírida y su esposo, Juan Diego, al que también mencionan en el video y que apenas si se ve, trabaja en un establecimiento comercial de la ciudad.
Según relata Sánchez, ese día iban rumbo a su casa, que queda por la vía al Coco. Como siempre, habían recogido antes a sus hijos en el lugar donde los cuidan. Se movilizaban los cuatro en la única moto que tienen.
La enfermera precisa que a la altura de la estación de gasolina estaban los agentes realizando control. “Cuando el de tránsito nos hizo el pare, ya estábamos muy encima, pero nosotros paramos. Él se nos cruzó por delante y mi esposo lo que hizo fue voltear el manubrio de la moto, ya habíamos parado, y el agente de tránsito le jaló el manubrio… yo caí al piso con mi bebé de 6 meses, mi esposo al ver que me caí, obviamente reaccionó”.
“Mi esposo soltó la moto y la moto le cayó al otro niño, y se fue contra el agente de tránsito, lo alcanzó a golpear, y uno de los agentes le partió un tubo en la cabeza (el tubo con el que realizan el pare)”, detalló Sánchez.
En el lugar había un policía, quien fue, según la enfermera, la persona que la ayudó a ponerse en pie, y evitó que el agente y el motociclista se fueran finalmente a los golpes.
Al final, de acuerdo con Sánchez, recibieron cuatro comparendos: Soat, tarjeta de propiedad, sobre cupo y por no utilizar casco. “Estamos de acuerdo en que no tenemos los papeles de la moto en regla, no cargamos elementos de seguridad y demás, sí es culpa de nosotros”, reconoció la mujer, pero se mantiene firme en su rechazo frente a la manera de actuar de los agentes, pues su trabajo es evitar accidentes, no provocarlos.
EL MORICHAL contactó vía WhatsApp y telefónicamente a Sandra Ríos, secretaria de Tránsito, para conocer su opinión sobre los hechos, pero no contestó por ningún medio. Ni la Alcaldía ni la Secretaría de Tránsito se han pronunciado públicamente frente a estos hechos.
Kelly Sánchez aseguró que desde la Secretaría de Tránsito nunca los buscaron para conversar o conocer su versión de los hechos.