
Habitantes del barrio Calarcá denuncian que la delincuencia está desbordada
Algunos vecinos del barrio Calarcá en Puerto Carreño (Vichada) denuncian un incremento de la inseguridad en el sector, debido a la presencia de nuevas bandas delincuenciales conformadas, según manifiestan, en su mayoría por menores de edad.
Esa situación ha llevado a que los habitantes del vecindario se vean obligados a encerrarse dentro de sus casas después de las 7:00 pm, con el fin de evitar los constantes robos a sus residencias y raponazos a los transeúntes en el barrio durante la noche.
Según los habitantes del Calarcá, el mal estado de las calles, la falta de alumbrado público, la ausencia de las autoridades de policía y el olvido de las autoridades competentes, ha producido que la delincuencia haya aumentado. “A esto se le suma la llegada de algunos extranjeros que se han quedado en la zona, sin duda se ha aumentado la sobrepoblación, el desempleo y la delincuencia”, dijo una habitante del sector.
El líder indígena Amorúa, William Contreras aseguró a EL MORICHAL que ha surgido una banda delincuencial conformada con niños de todas las edades. “Eso nos preocupa, porque después de las 6:30, 7:00 de la noche ya no se puede salir y los fines de semanas, estos niños y jóvenes se reúnen a ingerir alcohol, tomar tragos y a esperar a sus víctimas para despojarlos de sus pertenencias, esto se ha vuelto un caos” indicó.
Otra persona residente en el barrio mencionó que, “estos niños están dirigidos por los adultos y por los jóvenes más grandes, aquí en esta parte del barrio se han presentado varios hurtos, recientemente le quitaron una moto y los documentos a una señora. Y después de la 7:00 de la noche, si vamos a la tienda, uno tiene que estar pendiente porque salen de repente y le jalan las bolsas con las compras y se van corriendo, desaparecen en el medio de la oscuridad y el monte”, dijo la lugareña.
Contreras, hizo el llamado a las autoridades, a que visiten la zona y aunar esfuerzos para controlar la situación que llena de zozobra a sus habitantes. “Yo he sufrido amenazas por denunciar estos hechos. Pero insisto, mi llamado es al Instituto de Bienestar familiar (ICBF), a la Alcaldía, Gobernación, a la Policía que por favor vengan al Calarcá. Que venga aquí a hablar conmigo y me permitan poner estas quejas, para que ellos conozcas cual es la situación”, puntualizó el indígena líder.