El vil asesinato de don Luis Ernesto Salamanca en Puerto Carreño
El pasado jueves 24 de junio la capital de Vichada conoció la estremecedora noticia del brutal homicidio de un indefenso abuelo de 90 años de edad, quien recibió ocho heridas en su humanidad con arma blanca, que le segaron la vida. El crimen ocurrió a plena luz del día en un populoso barrio de la ciudad y habría sido perpetrado por dos sujetos que aún no han sido plenamente identificados por las autoridades.
Se trata de Luis Ernesto Salamanca, quien residía en el barrio el Mateo junto a su hija menor. “Era un hombre vulnerable, juicioso, dedicado a su casa. Muy pocas veces salía de la casa, solo para actividades de salud y si algo en el mismo barrio, por períodos cortos de tiempo, porque se cansaba mucho y ya casi no tenía fuerza para andar por cuenta propia pero siempre regresaba a su casa, tampoco salía frecuentemente”, dijo una de las hijas a EL MORICHAL.
Según indicaron sus familiares, don Luis salió de casa sobre las 9 de la mañana sin informar a dónde se dirigía. “A las 11:50 am mi hermana llegó del trabajo y se percató que mi papá aún no había llegado, no estaba en casa y me lo reporta a mí, porque sabíamos que algo había pasado”. La situación generó desconfianza en los familiares porque el anciano, que al parecer salió de prisa, había dejado sus pertenencias en casa, algo que habitualmente nunca ocurría.
“Sobre el medio día ya habíamos buscado en el barrio, en el hospital y sin resultados de él. Fuimos a la estación de policía a dar el parte de su desaparición y cuando estábamos allí escuchamos el reporte por uno de los radios que había aparecido un cuerpo sin vida frente a la escuela Jorge Eliecer Gaitán. Inmediatamente salimos al sitio, al llegar ya estaba el cuadrante de la policía y el cuerpo de mi papá ahí en ese lugar”, relató su hija.
Al lugar llegaron las autoridades para realizar el respectivo proceso legal, sin embargo, los delincuentes ya habían huido del sitio. Extraoficialmente se conoció que son dos los delincuentes que le segaron la vida al adulto mayor.
“Al parecer, mi papá fue víctima de dos hombres que, con puñal en mano, le causaron en el abdomen ocho puñaladas, una en el corazón, dos más a la altura del pecho, dos heridas en uno de sus brazos y le partieron el tabique nasal con arma contundente, le dieron múltiples golpes en la cabeza. Eso es lo que yo tengo en conocimiento. Fue una manera cruel y despiadada”, dijo Nancy Salamanca.
Hasta el momento, las autoridades se encuentran en el proceso investigativo y los descendientes de Salamanca piden a la comunidad prestar información relacionada al caso, pues consideran que cualquier detalle podría ayudar a las autoridades para esclarecer este crimen y hacer frente ante estos hechos de violencia e inseguridad que se vienen presentando en Carreño.
“Confió en Dios y sé que los autores materiales que participaron en el delito van a pagar lo que hicieron con mi papá. Pido a las autoridades, a la Fiscalía General, a la Policía Judicial, mucha responsabilidad, celeridad en este caso, queremos un trabajo con resultados para esclarecer el hecho y que se castigue a los responsables de este crimen”, puntualizó una de las hijas.
¿Quién era don Luis Ernesto Salamanca?
Don Luis Ernesto Salamanca nació en 1932 en Boyacá, pero llegó a Puerto Carreño desde casi 50 años. Hizo familia y aportó importantes avances sociales para la región. Era conocido por ser un hombre trabajador, respetuoso, correcto y no tenía enemigos.
La población de Puerto Carreño, especialmente quienes lo conocieron de cerca, lo recuerdan como un hombre ejemplar: esposo, padre de familia de 4 hijos, amigo y el abanderado de realizar las primeras trochas que hoy día comunican vía terrestre a Puerto Carreño con el municipio de La Primavera, Santa Rosalía y todas las fincas aledañas de esa zona, porque gran parte de su vida trabajó como transportador y camionero.
En los años 70, en su vehículo apodado el “Mil Guerras” abrió los primeros caminos, sin pensar que estos serían los principales medios de comunicación terrestre del Vichada actual.
“Mi papá fue muy trabajador, humilde y nunca tuvo enemigos. Era respetuoso, serio, correcto y hogareño. Por eso tenemos un clamor de justicia de parte mía y de toda mi familia. Hay un clamor general de parte de la población para que su muerte no quede impune”, dijo la familiar.