El coronavirus llevó a colegios rurales de Guainía a implementar modelo de educación propia

Basados en la experiencia de un trabajo educativo de larga trayectoria en el departamento del Guainia, atendiendo 23 centros educativos en el área rural con 3.100 estudiantes; para este año 2020 y bajo las circunstancias de aislamiento producto del Covid-19; el Vicariato Apostólico de Inírida ante el hecho de no contar con la gran posibilidad de conectividad virtual, decidió, con autorización de la Secretaría de Educación Departamental, implementar el modelo de educación propia, donde los docentes involucran a los mayores de las diferentes comunidades indígenas a través de talleres, en la transmisión del conocimiento a las nuevas generaciones.

Este nuevo modelo, abre la posibilidad para que los docentes desde sus centros educativos, trabajen con metodologías diversas como talleres, videos, tutorías, post cat, minidocumentales y guías que son claves, pues es allí donde se recupera la parte tradicional ancestral; material de trabajo que se entrega a padres de familia, cuidadores y estudiantes mayores teniendo en cuenta un cronograma regulado por grados y sin llegar a descuidar las recomendaciones higiénicas para prevenir el contagio del Covid-19. Hoy están llegando a Barrancominas todos los elementos de protección recomendados por la OMS y el Ministerio de Salud de Colombia.

Para Monseñor Joselito, la educación propia es el camino adecuado para recuperar el idioma, los saberes de los ancianos y las prácticas de alimentación de la comunidad, contribuyendo a recuperar el orgullo de ser pueblos originarios del mundo habitantes milenarios de la casa común o planeta tierra.

Con éste proyecto innovador, los maestros además de orientar sus clases lo harán en su propia lengua, teniendo la misión de establecer maneras creativas para hacer de la educación, algo propio e innovador, donde de acuerdo al grupo étnico, el docente que entregue el material de trabajo combinará su labor con los docentes tradicionales que han venido por años desempeñando su labor con metodologías diseñadas por Mineducación.

Para monseñor, este modelo generará en los estudiantes de los pueblos indígenas una oportunidad para reencontrarse y entender la flora, la fauna, las costumbres, la lengua y las luchas de sus pueblos. Esta también es la gran oportunidad para implementar los trabajos de grado en etno-educación realizados por el más de 60% de los docentes que han realizado sus estudios superiores en el Instituto Misionero de Antropología IMA-UPB en Medellín.

3 thoughts on “El coronavirus llevó a colegios rurales de Guainía a implementar modelo de educación propia

  1. La educación propia ha sido el reclamo de los pueblos indígenas del Guainía desde varías décadas. En ese camino, el Vicariato de Inirida ha sido un poderoso opositor, prohibiendo que niños y niñas indígenas hablen su idioma materno, despreciando el conocimiento sobre el territorio, rechazando a los y las sabedores indígenas locales y justificando su incomprensión de la cultura con el argumento de nuestra torpesa en el segumiento de la educación escolarizada de «calidad». Si hay algo que «recuperar» es el ánimo transformador de nuestros sabedores y autoridades en las comunidades en pro de la educación propia, pues gracias a los esfuerzos de nuestras familias no se ha permitido que nuestros idiomas se extingan y que el saber de nuestro territorio desaparezca como lo ha buscado la postura racista y colonial de la educación impartida por el Vicariato.

  2. El reclamo por una educación propia ha sido el grito milenario de las comunidades indígenas en el Guainía. En este camino el Vicariato de Inírida ha sido un poderoso opositor, prohibiendo que nuestros niños y niñas manejen su idioma en espacios escolares, y justificando su desprecio por nuestra cultura con el argumento del bajo desempeño en la “calidad” escolar de nuestros estudiantes. Si hay algo que “recuperar” es el manejo de nuestra educación ejerciendo nuestro derecho a desarrollarnos desde nuestro territorio y la capacidad de defender nuestro conocimiento propio del pensamiento racista y colonial que lo ha manejado hasta ahora.

  3. La cuarentena por covid-19, como todo evento eventual, saca lo mejor de nuestra inteligencia y sentimientos, es un memento o espacio para volver a conversar en familia y retomar temas que están arraigados en niños, niñas, jóvenes y mayores, pero que no se le ha dado la importancia que merece, es así como decimos que estamos perdiendo valores, nuestra propia cultura, cuál? la de nuestros abuelos, nuestros padres, la de nuestra patria chica donde nacimos y crecimos… Bienvenido sea este tiempo, que si bien, es de dolor por la perdida de miles de Colombianos, es también tiempo de centrarnos en cada uno de nosotros y desde la familia brindar lo mejor a la sociedad, donde vivirán nuestros hijos y nietos.

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