El apoyo de la Iglesia Católica de Puerto Carreño a la población vulnerable en época de pandemia
Desde el año 2019 la Iglesia Católica viene implementando unas líneas de atención orientadas principalmente al sector salud, agua y saneamiento básico, transferencias de dinero en efectivo multipropósito, como una manera de apoyar a la población migrante asentada en Puerto Carreño.
Se trata del proyecto “Apoyo Multisectorial a Familias Afectadas por la Crisis Migratoria Venezolana en Colombia”, ejecutado por Pastoral Social y financiado con recursos donados por el Gobierno de Estados Unidos, a través del cual se entregan ayudas humanitarias a la población venezolana y colombiana vulnerable o retornada, como una manera de mitigar y afrontar la crisis social y económica provocada por la pandemia del coronavirus.
A la fecha, 1.000 personas se han beneficiado con unos kits de aseo personal. También, se construyó un punto de hidratación con baterías sanitarias y zona de lavado en un lugar estratégico de la capital vichadense, que les permite a las familias migrantes acceder a estos servicios gratuitamente y realizar el lavado de manos constantes y sus respectivas capacitaciones sobre el tema de saneamiento y promoción de la higiene.
En la línea de transferencia de efectivo multipropósito, según Pastoral, se ha beneficiado más de 1.071 hogares que corresponden a más de 4.200 personas entre hombres, mujeres, niños, niñas, adolescentes y adultos mayores que fueron seleccionados por su condición de vulnerabilidad, número de personas que conforman el núcleo familiar, madres cabeza de hogar, discapacidad, grupo étnico, LGTBI, entre otros. Los hogares beneficiarios reciben una transferencia de $1.000.000 por única vez, distribuido en cuatro meses.
Además, más de 600 familias migrantes fueron orientadas en trámites de salud a través de las brigadas de salud realizadas en articulación con IOM, E.S.E. Hospital Departamental San Juan de Dios, Acción Contra el Hambre, entre otros cooperantes.
“Desde que empezó la pandemia ha sido un poco complejo llevar a cabo las actividades que veníamos desarrollando dentro de la Pastoral Social, ya que nuestro trabajo es ir a los barrios para hacer las caracterizaciones y los grupos focales, pero con el encierro no pudimos ir presencialmente… nos tocó realizar llamadas telefónicas para hacer las caracterizaciones individuales, empezar a buscar a las personas para que se dirigieran a la oficina uno por uno para darle a continuar con el proceso”, explicó el diacono de Puerto Carreño, Guillermo Giraldo Díaz.
Según Danny Delgado, un padre de familia venezolano con cinco personas a su cargo y quien recibió el auxilio económico, “Al igual que varios compañeros que recibimos la ayuda, logramos organizarnos e invertir estos recursos en algo productivo para la sociedad. Acondicionamos un lote de terreno para emprender con la siembra de pimentón, tomate y cilantrón para nuestro consumo y el sustento de la población de Puerto Carreño”, expresó.
Desde la Pastoral Social y el Vicariato Apostólico de Puerto Carreño, insistieron en el trabajo de este proyecto es incluyente, ya que un 20% de nacionales colombianos en situación de vulnerabilidad, indígenas de la zona, también fueron beneficiados con estas líneas de ayudas y mercados.
“La idea es que en tiempos de pandemia tengan un apoyo, actualmente con el apoyo del Consejo Danés, se están beneficiando a unas 1.800 familias con almuerzos. Asimismo, hemos entregado lonas, tejas, estufas y pipas de gas, sillas de ruedas para niños discapacitados para ayudar a las familias más necesitadas de la población migrante y nacional. Ha sido un apoyo impresionante, es una alegría para nosotros el poder brindar estas ayudas. El Papa Francisco, nos invita a reflexionar y debemos acoger, proteger, promover e integrar a todos sin distinción porque Dios siempre está con cada uno de nosotros” finalizó el Padre y director de la Pastoral Social en la capital de Vichada.