Editorial: La participación comunitaria brilla por su ausencia…
Al comenzar el año 2017 EL MORICHAL ve con gran optimismo como se viene transformando en el instrumento de participación de las comunidades de Vichada y Guainía, pues gracias a las pocas acciones de fortalecimiento comunitario y de las organizaciones participativas que deben cumplir los departamentos, la población en general identifica en nosotros la oportunidad de influir en la toma de decisiones de los alcaldes y gobernadores.
De una indiferente comunidad flotante, la población de Vichada logró pasar a ser una comunidad participativa desde el sector comunitario al tener una importante visibilización a través de las Juntas de Acción Comunal, pero la precaria respuesta institucional solo alimentó la desconfianza comunitaria en las corporaciones de gobierno local (alcaldías y gobernación). Tal precariedad implicaría antes que todo la voluntad de los gobiernos y podría leerse por ejemplo, en la creación de un referente para el desarrollo comunitario y la participación en el nivel departamental con enlaces específicos en los cuatro municipios, la creación de las promotorías comunitarias o de sectores como la juventud y la mujer en los tres municipios donde no existen y en la continuidad, permanencia y aumento gradual de la oficina de Asuntos Comunales del Municipio de Cumaribo. Éste tipo de acciones son responsabilidad expresa de las Secretarías de Gobierno, sin mencionar el resto de organizaciones y sectores que debieran tener su promoción en las primeras líneas de los ejecutivos.
A pesar que la dinámica comunal fue pieza fundamental en la colocación del anterior alcalde de Cumaribo y del anterior Gobernador de Vichada, el 2016 solo mostró un sector comunal mucho más débil y dividido que antes de su visibilización, a pesar de contar ahora con un defensor comunitario, las juntas de acción comunal no logran encontrar un liderazgo visible que dirija las voluntades de los gobiernos locales hacia el fortalecimiento de sus organizaciones de base.
Durante los dos últimos años, en la Alcaldía de Cumaribo – en los demás municipios ni siquiera existe el cargo – no se nombró al Promotor de Asuntos Comunales, lo que además de ser un indicador de la poca importancia que el sector denota para los gobernantes, es además una de las causas de las debilidades internas en las organizaciones comunitarias, que llegan a confundir sus estatutos, las funciones de sus cargos, no llevan libros a la fecha, ni entregan ordenadamente ni en las fechas pactadas las rendiciones de cuentas… abonando por todos los flancos la división y el desinterés en las comunidades, quedando así a merced de intereses personales en momentos electoreros. Si esto sucede con las organizaciones básicas que son enlace del Ministerio del Interior y de Gobierno ¿Qué estará sucediendo con las demás organizaciones y/o los demás mecanismos de participación?
Desde luego los Comités y Mesas de Participación de los sectores salud y educación son un desconocimiento para sus respectivas poblaciones diferenciadas. A la minoría de personas con discapacidad le tocó presionar desde el gobierno anterior para que al fin durante el mes de noviembre de 2016 se realizara una actividad de visibilidad para este segmento de la población, en la que se notó más la solidaridad privada que la iniciativa gubernamental.
Adscritos a educación se encuentran también los sectores de cultura, recreación y deporte, que se lucen con los festivalitos y campeonatos “relámpago” pero que no presentan estrategias estructurales y permanentes, ¿pero para qué? Si los consejos municipales de cultura o de deporte ni siquiera son convocados. Nadie responde por la inversión departamental en la formación deportiva en los municipios diferentes a Puerto Carreño. Igual situación vive la formación cultural. ¿Cómo pues, han podido direccionar la inversión del recurso público si no han convocado la participación comunitaria en los consejos de ley?
Párrafo adicional merece la participación en el sector de educación, donde la gran mayoría desconoce las grandes responsabilidades de los consejos directivos de las instituciones, que en consecuencia no promueve la conformación y fortalecimiento de las Asociaciones de Padres de Familia y las Asociaciones de Exalumnos – pieza clave en la gestión de recursos de mejoramiento de las instituciones -, lo que en el mediano y largo plazo se ve reflejado en los indicadores de calidad ante pruebas Saber, con un desmotivado y desinteresado personal docente en medio de una comunidad indiferente ante una población menor expuesta a entornos de alto riesgo.
Si esto sucede en lo social, ¿qué sucede en lo productivo? La participación es un total desconocimiento para los funcionarios que deben liderar el desarrollo económico y agropecuario, durante los tres últimos años y luego del Paro Nacional Agrario, uno de los compromisos de gobierno con los campesinos fue el resurgimiento y redinamización de los Consejos Departamentales de Agricultura – CONSEA alimentados por los Consejos Municipales de Desarrollo Rural – CMDR, lo cual dio algún impulso a la participación campesina en Vichada, especialmente contando con la Asistencia Técnica de la Agencia de Desarrollo Local – ADEL, que se terminó en 2014. En 2016 tales consejos no fueron convocados, ignorando incluso las recomendaciones de las Alianzas Productivas, las cuales deben ser priorizadas y recomendadas desde el seno de estos comités.
EL MORICHAL es optimista porque por encima de todos los esfuerzos de éstos funcionarios públicos por aumentar la desconfianza y la desesperanza en la población; las comunidades se las han arreglado para encontrar entidades y organizaciones con las que sí han podido sacar metas adelante, como el caso de la población de Chupave, Príncipe y Güerima que ahora auto reconociéndose como el “el Triángulo del Cacao” agradece el acompañamiento que el Grupo de Apoyo al Comandante GAC de la Fuerza Aérea Colombiana ha hecho hasta lograr un pacto gana-gana con una importante compañía del cacao, y ahora transfieren el modelo a la zona de influencia de Palmarito y Chaparral.
Lo mejor para la gente de Vichada apenas está por llegar, ahora el Vichada es más cercano, porque han mejorado algunas comunicaciones y aún sigue estando casi todo por hacer. Confiamos en que las personas en Vichada nos continuaran enviando sus noticias, anuncios y opiniones. Nos alegra que en Guainía nos estén abriendo sus ventanas y contándonos sus hechos y opiniones. Esperamos que a partir de ésta ventana de información, se abran otras puertas a la participación ciudadana, hasta ahora relegada por los estamentos institucionales.