Por esta razón, alcalde y exalcalde de Cumaribo podrían recuperar su libertad en enero del próximo año
Uno de los artículos de la ‘Reforma a la justicia’ que cursa en el Congreso de la República generó preocupación en la Fiscalía General de la Nación, a tal punto que el pasado 27 de octubre el ente acusador envío una carta al Capitolio presentando vario cuestionamientos.
En el documento, que está firmado por el Fiscal General Néstor Humberto Martínez, se manifiesta preocupación frente a la limitación a un periodo máximo de una año de la detención preventiva. “La mencionada propuesta afecta sensiblemente la acción del Estado contra el delito”, argumenta la entidad.
Según la Fiscalía, el tiempo promedio de los procesos en el país de 18 meses, pero en casos como los de delitos contra la administración pública es de dos años y cinco meses.
En palabras de la Fiscalía, esto significaría poner en riesgo “todas las detenciones preventivas impuestas en la actualidad”.
Para darle peso a su argumento, el ente acusador precisó que “la situación resulta preocupante… podrían quedar en libertad los presuntos responsables de algunas de las investigaciones más relevantes en materia de derechos humanos, crimen organizado y corrupción en la administración pública”, y citó algunos casos entre los que se encuentra el del alcalde y exalcalde de Cumaribo.
El alcalde de Cumaribo para el periodo 2016 – 2019 Hermenegildo Beltrán, y el exalcalde Ardulfo Romeros fueron capturados por presuntos casos de corrupción en enero de este 2018.
“El desfalco en más de $900’000.000 de recursos del sistema de seguridad social en salud, destinados a atender la desnutrición de población indígena en un caso en que están privados de la libertad el alcalde y exalcalde del municipio de Cumaribo-Vichada, quienes de aprobarse el artículo quedarían en libertad en enero de 2019”, explica el documento.
Sin embargo, en las últimas horas, Ernesto Macías, en respuesta a la carta del fiscal, anunció que presentará una proposición para eliminar dicho artículo.
De todas maneras, la reforma a la justicia sigue su curso en el Senado para su aprobación y cualquier cosa puede pasar.